- Un amigo te confía sus problemas, no esperando que le des una solución, solo deseando compartir contigo sus penas.
- Un amigo sabe lo que deseas y anhelas en la vida.
- Un amigo conoce tus miedos y pesadillas.
- Un amigo está al alcance de una llamada y te dedica el tiempo que necesites.
- Un amigo no tarda en darte un abrazo.
- Un amigo tiene sus hombros listos para recibir tus lágrimas.
- Un amigo te levanta y usa sus brazos para que te apoyes en el cansancio de tu camino.
- Un amigo conoce hasta el más obscuro de tus secretos.
- Un amigo se apunta a hacer contigo las locuras que se te ocurre o por lo menos te apoya.
- Un amigo te va a decir la verdad aunque te duela.
- Un amigo se alegra con tus triunfos.
- Un amigo conoce tus defectos.
- Un amigo no te abandona hasta cuando tú mismo lo abandonas.
- Un amigo será tu amigo hasta el fin de tus días aunque la distancia los separe.
Es difícil ser un buen amigo, sin embargo usamos tanto esa palabra que estamos convencidos que cualquier conocido lo puede ser.
Yo también quisiera ser una buena amiga, lástima que sea muy exigente y no pueda ofrecer lo mismo que pido de un amigo, pero no me preocupo, es muy difícil encontrar a alguien que te ame así, sólo hay un ser que lo puede hacer:
“No hay amor más grande que dar la vida por los amigos” Jn 15, 9-17
Jesús, es nuestro verdadero amigo fiel, y a parte de él sólo hay una persona que cumple con todos mis requisitos y después de 15 años aún sigue siendo mi mejor amigo...
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