Tercer día de la novena

Oración Inicial

Hoy invocamos Señor tu presencia, y mencionamos tu nombre con mucha humildad, te ofrecemos Señor a ti esta reunión como muestra de devoción y fe. Satura nuestras mentes con tu luz, ilumina cada rincón oscuro de nuestras vidas, tómalas y transfórmarlas en instrumentos que sirvan para tu Gloria. Búscanos y llámanos. En los momentos de pesar acompáñanos, en los momentos de confusión guíanos y en los momentos de alegría danos un corazón agradecido.
Amén.

Presentación del personaje del día:

San Francisco, creador del pesebre, introduce dos nuevos elementos en la representación del nacimiento del niño Dios. Son la mula y el buey. El buey, animal fuerte y fiel, seguramente lo ha deducido puesto que las narraciones bíblicas nos hablan de un establo; la mula recuerda aquel animal en el cual se trasladó María desde Nazaret hasta Belén. En estos dos animales, se representa toda la armonía de la naturaleza que llega a su plenitud en Jesucristo. También se nos recuerda que a aquél a quien nadie quiso recibir en su casa, fue calentado y acogido por estos animales. Escuchemos lo que nos dice el profeta.

Lectura Bíblica. (Is 11, 1-16):

Una rama saldrá del tronco de Jesé, un brote surgirá de sus raíces. Sobre él reposará el Espíritu de Yahvé, espíritu de sabiduría e inteligencia espíritu de prudencia y valentía, espíritu para conocer a Yahvé y para respetarlo, y para gobernar según a sus preceptos. No juzgará por las apariencias ni se decidirá por lo que se dice, sino que hará justicia a los débiles y defenderá el derecho de los pobres del país. Su palabra derribará al opresor, el soplo de sus labios matará al malvado. Tendrá como cinturón la justicia, y la lealtad será el ceñidor de sus caderas. El lobo habitará con el cordero, el puma se acostará junto al cabrito, el ternero comerá al lado del león y un niño chiquito los cuidará. La vaca y el oso pastarán en compañía y sus crías reposarán juntas, pues el león también comerá pasto, igual que el buey. El niño de pecho jugará sobre el nido de la víbora, y en la cueva de la culebra el pequeñuelo meterá su mano. No cometerán el mal, ni dañarán a su prójimo en todo mi Cerro santo, pues, como llenan las aguas el mar, se llenará la tierra del conocimiento de Yahvé. Palabra del Señor.
Palabra del Señor.

Oración Final 

Hoy hemos visto que Dios cumple sus promesas. "El lobo habitará con el cordero, el puma se acostará junto al cabrito". A veces, los seres humanos tenemos un corazón más indolente que el de cualquier bestia de la naturaleza. Hoy te pedimos Señor que abrigues nuestros corazones, imprégnalos de bondad, enséñanos a amar y a servir, busca en lo más profundo de nuestro ser aquello que te pueda ser útil, aquel ápice de bondad y multiplícalo un millón de veces para que podamos ser dignos de ser llamados hijos del Altísimo.

Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo
Amén

Cantemos un poco y alegrémonos porque Jesús está aquí :-)

El texto a excepción de las oraciones ha sido tomado de la página de Néstor Briseño quien propone rezar la novena dedicando un día a cada una de las figuras que compone el humilde pesebre. Y los videos son tomados del sitio web yesheis.com una forma interesante de compartir a Jesús y de You Tube.